Me despidieron, ¿qué hago?
Seguir adelante.
¿Así nada más? ¿Olvido y sigo?
No, se trata de un proceso.
Como todo proceso, requiere reflexión profunda.
Y luego, de un plan.
Eso es obvio:
Mi plan es conseguir otro empleo.
Claro, pero el asunto es más complicado. Tu prioridad debe ser conseguir un nuevo trabajo, por supuesto. Pero un despido es una experiencia traumática. Puede tener graves repercusiones tanto emocionales como en tu reputación laboral.
Por lo tanto, seguir adelante no se trata únicamente de conseguir un nuevo trabajo.
Seguir adelante se trata de sanar.
Y convertir una experiencia desagradable en una fortaleza.
¡Me despidieron!, ¿cómo puedo salir fortalecido de un despido?
De entrada, tienes que ser una persona dispuesta a ser completamente honesta contigo misma.
Para ello, quizá pueda ayudarte esta guía emocional en cinco pasos para salir fortalecido de un despido…
Guía emocional para salir fortalecido de un despido
¿Por qué me despidieron?
El primer paso es entender por qué te despidieron.
En despidos justificados, las causas pueden segmentarse en dos grandes grupos:
1.- Factores externos de un despido laboral
No dependen de ti. Es cuando tu despido se debe a situaciones de la compañía. Por ejemplo, recorte de personal a causa de disminución en el presupuesto. O los nuevos objetivos de la empresa ya no contemplan tu área de especialidad.
CAUSAS
En estos casos, tú no eres responsable de tu despido. Es decir, no has fallado. Si te han despedido, es a causa de variables que no puedes controlar.
SENTIMIENTOS
- Ira
- Impotencia
- Deseo de venganza
PELIGROS
El mayor peligro es dejarte controlar por estos sentimientos. Si ira, impotencia y deseo de venganza controlan tus acciones, estarás en problemas. Antes de hacer algo, debes tranquilizarte. Respira. Y no hagas nada hasta tener la cabeza fría.
LO QUE NO DEBES HACER
- Ser grosero
- Reclamar violentamente (ya sea por correo, teléfono o persona)
- Humillar a alguien para desquitar tu enojo
LO QUE SÍ DEBES HACER
- Decir adiós con educación
- Manifestar tu inconformidad desde el respeto
- Mantener todas las relaciones cordiales
2.- Factores internos de un despido laboral
Dependen de ti. Es cuando tu despido se debe a que quizá has descuidado tus responsabilidades o cometido un error grave. Por ejemplo, incumplir tiempos de entrega de manera reiterada o violentado a alguna de las personas con las que trabajas.
CAUSAS
En estos casos, tú has provocado tu despido. Es decir, has fallado. Debes enfrentar un proceso de aceptación y voluntad de cambiar.
SENTIMIENTOS
- Culpa
- Arrepentimiento
- Depresión
PELIGROS
El mayor peligro es no afrontarlos. Culpa, arrepentimiento y depresión son sentimientos que debes asumir y sanar de forma activa.
LO QUE NO DEBES HACER
- Aislarte
- Huir
- Pensar que no eres lo suficientemente bueno
LO QUE SÍ DEBES HACER
- Pedir perdón (si a alguien ofendiste)
- Capacitarte (si el despido se debe a fallas técnicas en tu trabajo)
- Acudir a terapia (si el despido se debe a mala actitud)
Te despidieron justificadamente. Pudo ser por factores externos o internos. Da igual. En ambos casos, hay algo que no debes olvidar.
LO QUE NO DEBES OLVIDAR
El mundo laboral es una red intrincada de relaciones. Y estas relaciones están en movimiento constante. No sabes a quién puedes volver a encontrarte. Lo peor que puedes hacer es cerrarte puertas. Incluso en un despido: Por más desesperado que estés, ¡no hagas nada que te cierre puertas! Quizá en el calor del momento no puedes verlo. Pero es una decisión que te agradecerá tu yo laboral del futuro.
Me parece bien todo esto.
Pero a mí me despidieron injustificadamente.
¿Qué hago?
1.- Asesórate con profesionales. Si tu despido es injustificado, tienes que defenderte.
Para eso existe el derecho laboral. Aquí te dejamos referencias para informarte y saber qué hacer ante un despido injustificado.
¿Qué hacer ante un despido injustificado?
Derechos de un empleado cuando es despedido
10 derechos que tienes si te acaban de despedir
25 cosas que puedes hacer si te despiden
Me despidieron, ¿ahora qué hago?
2.- No tomártelo personal
Te despidieron.
Seguiste nuestro primer paso:
Saliste de forma educada de la empresa. Sin enemigos.
Te comportaste de forma racional y madura. ¡Muy bien! Hacia el futuro, te has dejado las puertas abiertas. Eso es bueno. Pero sólo tiene que ver con tu imagen profesional. Es decir: Una construcción exterior. Ahora debes trabajar tu interior. Una cosa es haber contenido tus impulsos inmediatos. Y otra muy distinta trabajar realmente tus emociones. Piensa que un despido es una experiencia traumática. Por lo tanto, no debes descuidarla. No debes pensar que, una vez firmado el finiquito, todo ha terminado. Al contrario: Es cuando empieza lo verdaderamente importante: ¡Salir fortalecido de un despido! Y lo primero que debes hacer es un asunto vital: No tomártelo personal. Te pudieron despedir por factores externos que no controlas. Te pudieron despedir porque cometiste un error grave. En cualquiera de los dos casos, debes entender algo: No te despidieron por ser tú. Debes resolver esto si quieres salir fortalecido. Puede ser un proceso difícil. Y es probable que requieras ayuda. Tomar terapia resulta ideal. Una opción es Terapify. Ahí encontrarás cientos de opciones de profesionales para tomar terapia en línea a precios accesibles. Si lo haces, no pierdas de vista tu objetivo: Me despidieron y debo trabajar para no tomármelo personal. Más que hablar con alguien, es increíble lo útil que resulta escucharte. Una vez que has dejado de tomártelo personal, estás listo para seguir adelante.
3.- Comenzar un proceso de desapego
Te despidieron.
Saliste de forma educada de la empresa.
Has dejado de tomártelo personal.
Lo que sigue es comenzar un proceso de desapego. Es probable que hayas desarrollado una rutina laboral. Gente y lugares que solías frecuentar. Incluso calles y paisajes que ya formaban parte de tu vida diaria. O quizá esquemas y estructuras (en el caso del trabajo remoto). Es necesario que te desapegues de todo eso. Debes entender que tu vida ya no forma parte de esas cosas. Debes rodearte de cosas nuevas. Y poco a poco ir resignificando tus días.
La música atmosférica es una herramienta útil para hacerlo. Carece de acontecimientos sonoros evidentes. Y provoca estados quietos y meditativos.
Tres sugerencias:
4.- Haz las cosas que siempre has querido hacer
Te despidieron.
Saliste de forma educada de la empresa.
Has dejado de tomártelo personal.
Comenzaste un proceso de desapego.
Ahora haz lo que siempre has querido hacer.
Imaginemos que trabajabas en una empresa de programación. Y siempre te ha ilusionado hacer animaciones creativas. Es el momento perfecto. Tus días post-despido debes llenarlos de actividades que te entusiasmen. Dirígete hacia todos los lugares que tenías vetados en tu trabajo y siempre anhelaste. Para eso se supone que existe el finiquito: Para que tengas un período de reflexión y recreación antes de tomar el siguiente paso serio. Y este periodo debes utilizarlo para hacer las cosas que siempre has querido hacer.
5.- Busca un lugar más adecuado para ti
Te despidieron.
Saliste de forma educada de la empresa.
Has dejado de tomártelo personal.
Comenzaste un proceso de desapego.
Estás haciendo las cosas que siempre has querido hacer.
Ha llegado el momento de buscar un nuevo trabajo. Quizá el cuarto paso (hacer las cosas que siempre has querido hacer) te lleva de manera natural a tu trabajo perfecto. Quiźa no. En ese caso, debes buscarlo. Pero tienes todas las herramientas para hacerlo de manera correcta. Tu despido quedó atrás. Emocionalmente estás listo para llegar a un mejor lugar. Has salido fortalecido. Todo va a estar bien.