En la última edición de la serie Aumenta tu productividad, hablamos sobre cómo mantener tu concentración y mencionamos la técnica pomodoro, ahora te enseñaremos a aplicarla.
La técnica pomodoro es un método de gestión de tiempo y consiste en dividir el tiempo en periodos de alta concentración y alternando pequeños descansos o pausas que ayuden a mejorar la agilidad mental, contribuyendo al aumento de tu productividad.
Está formada por cinco etapas: planteamiento, anotación, registro, proceso y visualización. Durante las primeras dos etapas debes elaborar una lista con las tareas que debes completar en el día y, al completar los pomodoros (así le llaman a los lapsos de tiempo de concentración), se registran para su futuro análisis, así puedes evaluar tu proceso y hacer las mejoras necesarias.
Podemos simplificar todo en cinco pasos:
- Decidir las tareas a realizar.
- Programar el pomodoro (la alarma) a 25 minutos.
- Trabajar de forma concentrada e intensiva, sin interrupciones, hasta que suene la alarma.
- Descanso de 5 minutos, puedes caminar, ir por un café, checar si ya te contestó tu ex… cualquier cosa que no sea trabajo sirve.
- Iniciar el proceso de nuevo. Al completar cuatro pomodoros puedes tomar un descanso más largo, como de 20 o 30 mins.
Una vez que le hayas terminado varios procesos, es recomendable hacer una autoevaluación para hacer los ajustes necesarios. Tal vez 25 minutos son demasiado largos y no logras mantener tu concentración, en ese caso puedes disminuir el tiempo y hacer más bloques con descansos más pequeños intercalados. El propósito de esto es que logres ponerte metas de tiempo de concentración ininterrumpida que funcione para ti y que logre un avance más estable al completar tus actividades.
Esta técnica te ayudará a separar tu tiempo de trabajo con el tiempo de distracción, que muchas veces quedan mezclados y cuando menos piensas ya llevas cuarenta minutos metido en otra cosa. El tener una alarma con los tiempos te ayudará a ser más consciente y a disfrutar más tus descansos, ya que en esta técnica son una recompensa por cumplir tus objetivos.
Al principio será difícil llevar a cabo los pomodoros en absoluta concentración, pero no te rindas tan fácil, lleva tiempo y esfuerzo romper con hábitos que has establecido durante años. Es por eso que debes ajustar la técnica a tu preferencia, alargar o acortar los periodos de trabajo o descanso. Algunas personas prefieren dejar la técnica pomodoro para los trabajos más pesados, otros prefieren variar los tiempos de concentración a lo largo del día, empezar con largos periodos y gradualmente irlos disminuyendo. Prueba varias combinaciones hasta que encuentres lo que mejor se te acomoda, tal vez terminas concluyendo que la técnica no te va.
Cuéntanos si ya has utilizado esta técnica y deja tus sugerencias para quienes la quieran probar por primera vez.