Probablemente, cuando escuchas hablar de marketing, piensas solamente en anuncios o campañas para productos y empresas. En el caso del marketing personal, ese producto eres tú. Te daremos algunos consejos sobre cómo venderte mejor ante empresas o clientes potenciales.
Una manera muy importante de destacar entre la multitud es saber venderse adecuadamente. Sabemos que temas como el currículum y LinkedIn son también una parte importante. Es por eso que tenemos en nuestro blog una serie de artículos que te ayudarán más a detalle con esos temas.
Habilidades y valores.
Saber con certeza tus habilidades más valiosas y los valores sobre los que te riges es algo base para cualquier profesionista. Al presentar tus valores y habilidades es importante que te enfoques en los aspectos positivos.
Debes saber cuáles son tus fortalezas como empleado y las habilidades que aportas a una empresa o cliente. Si tienes oportunidad, comenta algunos ejemplos que te sirvan de apoyo.
También es importante que sepas cuáles son tus debilidades o áreas de oportunidad, no es algo que todos queremos decir, pero habla bien de una persona el hecho de que conozcas esos aspectos de ti. Si hablas de tus áreas de oportunidad, es importante que siempre hables sobre lo que estás haciendo para mejorar. Eso demuestra que no te quedas de brazos cruzados.
Es crucial que seas consistente en tus valores y habilidades, pues son como la brújula que te guía en el camino de tu marca personal.
Precio y plaza.
Conoce tu valor y ponle un número. Debes tener definido el precio de tus servicios, ya sea una tarifa por hora o algún otro criterio que consideres apropiado. Lo importante es que tengas un documento desglosado con precisión, esto dará ante los clientes seguridad y transparencia.
En cuanto a plaza nos referimos al lugar donde te encuentras. ¿Trabajo remoto o local? ¿Tienes disponibilidad de cambiar de residencia o de viajar? Es necesario que te plantees todo esto, ya que en muchas ocasiones esa información es de gran importancia para las empresas o clientes.
Promoción.
No nos referimos a descuentos de temporada o paquetes especiales. La promoción se enfoca más en el networking, en saber vender tus servicios en ambientes no tan profesionales como una sala de juntas en una empresa.
Una herramienta clave aquí es el discurso de elevador, que consiste en mencionar lo esencial de tu marca (en este caso serías tú y los servicios que ofreces) en lo que tarda un viaje en el elevador. En menos de 2 minutos debes de hablar lo suficiente para que la persona sepa bien qué ofreces, por qué debería elegirte a ti sobre tu competencia y le quede el interés suficiente para que acepte tu tarjeta de presentación.
Para que tu discurso de elevador sea implacable es importante que lo practiques lo más que puedas, ya sea frente al espejo o con amigos cercanos. Esto te ayudará a que, cuando llegue el momento de presentarlo ante una oportunidad laboral, te concentres más en la información que darás y no en que tienes nervios de decirlo porque es la primera vez que lo presentas.
Es importante también que tengas en mente que en cualquier situación podría darse la oportunidad de que te promociones, claro que no se trata de hostigarlos o que pases toda la reunión hablando de ti, solamente ten en cuenta que podrías toparte en cualquier lugar con alguien que te pueda ayudar a superarte laboralmente y estar preparado nunca está de más.
Ahora que ya sabes lo esencial para saber venderte, tómate un tiempo y analiza muy bien todos los puntos que vimos. Estarás preparado para cualquier oportunidad de networking o entrevista que se te presente.